por Zedekiel
Soplan Vientos De Cambio...
jueves, 17 de abril de 2014
Editorial: "Portal Cercano"
Año 5 - Ejemplar Nº 37 - Abril de 2014
por Zedekiel
por Zedekiel
Notas... Al Pasar: "El Camaleón"
por Uriel
Muchas veces, digamos que diariamente, en el ámbito en el cual nos desenvolvemos y llevamos a cabo nuestras tareas, se encuentra aquel ser, que sufre o padece el síndrome del “Camaleón”.
Es un ser bajo, ruin, que por lo general se presenta muy amigable, simpático y de confiar y extrovertido. Siempre está dispuesto a ayudar al prójimo, al compañero de trabajo; pero detrás del tocado, se esconde su falsa personalidad; se halla un alma despiadada, a la cual lo único que le interesa es cómo satisfacer su propio ego y vivir una vida “cómoda y fácil”; viviendo así una vida prestada y no la propia. Obvio que siempre se ocupa de hacer algo, pero a costillas del esfuerzo de los demás.
Haciendo honor al reptil que le da su apodo, se puede decir que, para no ser descubierto por su fuente de “alimento”, se mimetiza según la ocasión, le sea adversa o favorable; se reviste de la vida del otro o de los otros que le rodean o comparten su vida y cuando es descubierto huye velozmente para no ser herido de muerte.
Por lo general se caracteriza por manifestarse como un ser leal y fiel a quien le proporciona su subsistencia, sea, techo, trabajo, una amistad, etc., Vive siempre alerta en pos de captar o de sacar la mejor tajada de toda discusión; le agrada el chusmerío barato, es un gran adulador; dado que es un gran sembrador, sembrador de cizañas, de las cuales se beneficia saliendo airoso de toda pelea.
No es fácil ni difícil detectarlo, basta con estar atento a sus actitudes; siendo su principal error el tener doble cara, tampoco es necesario prestarle mucha atención para descubrirlo ya que, de tanto mentir u ocultar deja cabos sueltos que lo delatan, lentamente, pero lo delatan.
En definitiva, estimado lector, tenga cuidado, esté siempre atento, sin volverse loco, pues en todos lados se haya un “Camaleón”, en la familia, en el trabajo, en una mesa de amigos, en el gobierno, en todos lados, esperando vivir de ud. o de quien sea.
El Camaleón
Muchas veces, digamos que diariamente, en el ámbito en el cual nos desenvolvemos y llevamos a cabo nuestras tareas, se encuentra aquel ser, que sufre o padece el síndrome del “Camaleón”.
Es un ser bajo, ruin, que por lo general se presenta muy amigable, simpático y de confiar y extrovertido. Siempre está dispuesto a ayudar al prójimo, al compañero de trabajo; pero detrás del tocado, se esconde su falsa personalidad; se halla un alma despiadada, a la cual lo único que le interesa es cómo satisfacer su propio ego y vivir una vida “cómoda y fácil”; viviendo así una vida prestada y no la propia. Obvio que siempre se ocupa de hacer algo, pero a costillas del esfuerzo de los demás.
Haciendo honor al reptil que le da su apodo, se puede decir que, para no ser descubierto por su fuente de “alimento”, se mimetiza según la ocasión, le sea adversa o favorable; se reviste de la vida del otro o de los otros que le rodean o comparten su vida y cuando es descubierto huye velozmente para no ser herido de muerte.
Por lo general se caracteriza por manifestarse como un ser leal y fiel a quien le proporciona su subsistencia, sea, techo, trabajo, una amistad, etc., Vive siempre alerta en pos de captar o de sacar la mejor tajada de toda discusión; le agrada el chusmerío barato, es un gran adulador; dado que es un gran sembrador, sembrador de cizañas, de las cuales se beneficia saliendo airoso de toda pelea.
No es fácil ni difícil detectarlo, basta con estar atento a sus actitudes; siendo su principal error el tener doble cara, tampoco es necesario prestarle mucha atención para descubrirlo ya que, de tanto mentir u ocultar deja cabos sueltos que lo delatan, lentamente, pero lo delatan.
En definitiva, estimado lector, tenga cuidado, esté siempre atento, sin volverse loco, pues en todos lados se haya un “Camaleón”, en la familia, en el trabajo, en una mesa de amigos, en el gobierno, en todos lados, esperando vivir de ud. o de quien sea.
Poesía: "La Identidad"
por Uriel
"La Identidad"
Tras haber hallado
la llave de la liberación,
sólo queda, por descubrir,
la identidad.
Lo que realmente somos.
Uno es, él puede ser,
todos somos…
lo que vemos de cada uno de nosotros.
Está presente, aunque no la veamos.
Se encuentra oculta,
más allá de la personalidad.
No se la ve, pero se la percibe...
No se la toca, pero está…
No es efímera, es sutil y delicada.
La identidad es un todo,
y parte de cada uno de nosotros.
Vivimos, soñamos
y sufrimos con ella…
No conoce la muerte.
Bruscamente, muchas veces,
nos despierta…
otras tantas nos enfrenta
y, en ocasiones nos hace la guerra;
para descubrirla y nos regala una flor.
Es concreta, se emociona,
es idealista y voluntariosa…
Encontrarla es un tesoro muy preciado.
la llave de la liberación,
sólo queda, por descubrir,
la identidad.
Lo que realmente somos.
Uno es, él puede ser,
todos somos…
lo que vemos de cada uno de nosotros.
Está presente, aunque no la veamos.
Se encuentra oculta,
más allá de la personalidad.
No se la ve, pero se la percibe...
No se la toca, pero está…
No es efímera, es sutil y delicada.
La identidad es un todo,
y parte de cada uno de nosotros.
Vivimos, soñamos
y sufrimos con ella…
No conoce la muerte.
Bruscamente, muchas veces,
nos despierta…
otras tantas nos enfrenta
y, en ocasiones nos hace la guerra;
para descubrirla y nos regala una flor.
Es concreta, se emociona,
es idealista y voluntariosa…
Encontrarla es un tesoro muy preciado.
Filosofía: "Transmutación"
por Zedekiel
Musicoterapia: Nota Biográfica → Wolfgang Amadeus Mozart (parte 3)
por Azrael
Nota Biográfica
Wolfgang Amadeus Mozart
(parte 3)
Luego de sus opiniones sobre la corte de Luis XVI, W. A. Mozart fue hasta el clavecín de su estudio y comenzó a tocar un minué (menuet o menuetto, según el país). Sus dedos se deslizaban grácilmente sobre el teclado, a la vez que movía su cabeza mientras lo hacía. Nadie podría dudar de que estuviera sintiendo la música en su espíritu. Al terminar la pieza, aplaudí emocionado, ante lo cual, me miró sonriendo y me dijo: “Esta obra no está ahí abajo… La compuse aquí.” Al tiempo que expresaba esto, levantó su dedo índice y me guiñó un ojo, riéndose después ante lo que había dicho.
“Anteriormente le pregunté por su madre”, le dije, “y ahora me gustaría que me cuente sobre su padre, con el cual compartió en vida el arte de componer.”
“¡Ah, Leopold, mi amado padre!”, suspira, cerrando sus ojos por un momento. “Ahora mismo debe estar enseñándole música o violín a algún alumno… ¡Ja, ja, ja!”, dice, riéndose graciosamente. “Siempre fue su esencia, y lo sigue siendo. Naturalmente, ahora tiene más tiempo para componer, y lo disfruta más… No tiene que aguantar a ningún superior que le esté dando órdenes, y menos a los que tuvo en su vida física, lo cual, créame, amigo, es una gran ventaja. Más allá de que él siempre fue más respetuoso de las jerarquías que yo, eso no significa que aceptaba todo con una sonrisa. Más bien, sí lo hacía, pero por dentro, insultaba a toda la familia de quien le daba la orden, si ésta le era dada autoritariamente y sin tacto,” explica riéndose.
“Él fue quien le dio sus primeras nociones de música, al igual que a su hermana, ¿no es así?”
“Así es, y Nannerl (n.e.: su hermana) también me ayudó en mis primeros pasos. Mi padre fue un excelente maestro, más allá de que yo aprendía muy rápido y eso él lo notó. De ahí la necesidad de mostrar ese talento mío, porque él siempre creyó que hacerlo era un deber sagrado ante Dios y el mundo.”
“En cierto momento de su vida, usted trabajó muy cerca de su padre, ambos para el Arzobispo de Salzburgo.”
“Sí, es cierto”, contesta, mirando hacia arriba con una mueca de disgusto en su cara, “yo tenía un trabajo remunerado, era Organista de la Corte del Arzobispo. No era un gran dinero, lo cual hubiera sido lo más justo, no sólo por mis tareas ahí, sino por el hecho de tener que soportar al Cardenal Colloredo (el segundo de los arzobispos para el cual trabajé). Mi padre no tenía problemas con él por el carácter que tenía Leopold, pero yo no lo toleraba. Los músicos que estábamos ahí a su servicio éramos considerados simple empleaduchos a su sueldo. Nunca tuvo a bien considerar a las artes como algo esencial, más allá de ciertas acciones. Todo se fue tensando cada vez más entre él y yo, hasta que me despidió por mis “frecuentes ausencias” en viajes que yo realizaba en comisión de servicios. Mi padre quedó horrorizado con tal decisión, y a partir de ese momento, siempre que tenía oportunidad, no dejaba de lamentarse, no sin cierto recelo, por la dificultad (grande, por cierto) que había a la hora de conseguir músicos para la corte del Arzobispo cuando alguno era despedido o se iba. ¿A que no se sabe por qué casi ningún músico quería entrar a trabajar ahí? Piense mal y acertará…”, concluye, con un gesto de fastidio en su cara.
“Anteriormente le pregunté por su madre”, le dije, “y ahora me gustaría que me cuente sobre su padre, con el cual compartió en vida el arte de componer.”
“¡Ah, Leopold, mi amado padre!”, suspira, cerrando sus ojos por un momento. “Ahora mismo debe estar enseñándole música o violín a algún alumno… ¡Ja, ja, ja!”, dice, riéndose graciosamente. “Siempre fue su esencia, y lo sigue siendo. Naturalmente, ahora tiene más tiempo para componer, y lo disfruta más… No tiene que aguantar a ningún superior que le esté dando órdenes, y menos a los que tuvo en su vida física, lo cual, créame, amigo, es una gran ventaja. Más allá de que él siempre fue más respetuoso de las jerarquías que yo, eso no significa que aceptaba todo con una sonrisa. Más bien, sí lo hacía, pero por dentro, insultaba a toda la familia de quien le daba la orden, si ésta le era dada autoritariamente y sin tacto,” explica riéndose.
“Él fue quien le dio sus primeras nociones de música, al igual que a su hermana, ¿no es así?”
“Así es, y Nannerl (n.e.: su hermana) también me ayudó en mis primeros pasos. Mi padre fue un excelente maestro, más allá de que yo aprendía muy rápido y eso él lo notó. De ahí la necesidad de mostrar ese talento mío, porque él siempre creyó que hacerlo era un deber sagrado ante Dios y el mundo.”
“En cierto momento de su vida, usted trabajó muy cerca de su padre, ambos para el Arzobispo de Salzburgo.”
“Sí, es cierto”, contesta, mirando hacia arriba con una mueca de disgusto en su cara, “yo tenía un trabajo remunerado, era Organista de la Corte del Arzobispo. No era un gran dinero, lo cual hubiera sido lo más justo, no sólo por mis tareas ahí, sino por el hecho de tener que soportar al Cardenal Colloredo (el segundo de los arzobispos para el cual trabajé). Mi padre no tenía problemas con él por el carácter que tenía Leopold, pero yo no lo toleraba. Los músicos que estábamos ahí a su servicio éramos considerados simple empleaduchos a su sueldo. Nunca tuvo a bien considerar a las artes como algo esencial, más allá de ciertas acciones. Todo se fue tensando cada vez más entre él y yo, hasta que me despidió por mis “frecuentes ausencias” en viajes que yo realizaba en comisión de servicios. Mi padre quedó horrorizado con tal decisión, y a partir de ese momento, siempre que tenía oportunidad, no dejaba de lamentarse, no sin cierto recelo, por la dificultad (grande, por cierto) que había a la hora de conseguir músicos para la corte del Arzobispo cuando alguno era despedido o se iba. ¿A que no se sabe por qué casi ningún músico quería entrar a trabajar ahí? Piense mal y acertará…”, concluye, con un gesto de fastidio en su cara.
Divertimento Nº 6 en Do Mayor para ensamble mixto, KV 188
Partes / Movimientos
1) Andante
2) Allegro
3) Menuetto
4) Andante
5) Menuetto
6) Gavotte
2) Allegro
3) Menuetto
4) Andante
5) Menuetto
6) Gavotte
Metafísica: Puente Macro-Microcósmico
por Zedekiel
Reflexiones: "Románticos (Parte II)"
por Uriel
Quizás al comenzar la lectura de esta nota uds. piensen qué tiene que ver el hecho de ser romántico, con recordar una guerra trágica y déspota, librada hace 32 años atrás.
Y, en sí mismo tiene mucho que ver, al conmemorarse un año más de de la Gesta por las Malvinas; nota a la que deseo darle un enfoque diferente, sutil y de conciencia.
La mayoría de lo que allá fueron lucharon por una causa noble justa y soberana; convencidos por un efímero ideal que, al transcurrir el día a día lo convirtieron en propio; y que los fue contagiando.
Expusieron sus pequeños cuerpos y algunos su robustez, en un lugar inhóspito y hostil; pero lo hicieron con fervor, con amor, con miedo y pánico, pero con sentido y con carácter… llenos de ilusión, tal como nuestro himno lo representa, en su más profundo sentido romántico.
No pretendo darle una doble lectura a esta nota, sino, expresar lo que cada 2 de abril representa para mí; aunque no soy un ex combatiente, lo hago también por amigos y conocidos que allá fueron, por los que volvieron y hoy no están.
Escuché decir hoy, por TV, a uno de ellos, que había aprendido a convivir con la muerte, por aquel entonces, y hoy en día se daba cuenta que le había ganado, la batalla, a la muerte. Pero, que en sí mismo, le había empatado.
¿A qué se refiere esto? A que, le ganó a la muerte. Le gano a la transformación de su ser conciente y que por ende evolucionó en conciencia y en su personalidad; por ende ya no le teme a nada.
Quizás muchos podrán o no compartir este punto de vista, pero lo esencial es que, fue y es su Conciencia la que se transformó en todo sentido y eso es evolución pura y espiritual concreta.
Muchos fueron los que se quedaron allá para siempre, en un lugar que nos y les pertenece, pero ese es otro tema; y otros que volvieron y no pudieron “transformase en vida", no obstante lo consiguieron, porque, La Transformación, en sí misma la realizaron en el momento justo y necesario.
En definitiva, salud y honor para todos ellos, porque en la guerra también se puede morir de amor con dignidad, románticamente, por el compañero de al lado, por uno mismo y por nuestra bandera.
Reflexiones
Románticos
(Parte II)
La Transformación
Quizás al comenzar la lectura de esta nota uds. piensen qué tiene que ver el hecho de ser romántico, con recordar una guerra trágica y déspota, librada hace 32 años atrás.
Y, en sí mismo tiene mucho que ver, al conmemorarse un año más de de la Gesta por las Malvinas; nota a la que deseo darle un enfoque diferente, sutil y de conciencia.
La mayoría de lo que allá fueron lucharon por una causa noble justa y soberana; convencidos por un efímero ideal que, al transcurrir el día a día lo convirtieron en propio; y que los fue contagiando.
Expusieron sus pequeños cuerpos y algunos su robustez, en un lugar inhóspito y hostil; pero lo hicieron con fervor, con amor, con miedo y pánico, pero con sentido y con carácter… llenos de ilusión, tal como nuestro himno lo representa, en su más profundo sentido romántico.
No pretendo darle una doble lectura a esta nota, sino, expresar lo que cada 2 de abril representa para mí; aunque no soy un ex combatiente, lo hago también por amigos y conocidos que allá fueron, por los que volvieron y hoy no están.
Escuché decir hoy, por TV, a uno de ellos, que había aprendido a convivir con la muerte, por aquel entonces, y hoy en día se daba cuenta que le había ganado, la batalla, a la muerte. Pero, que en sí mismo, le había empatado.
¿A qué se refiere esto? A que, le ganó a la muerte. Le gano a la transformación de su ser conciente y que por ende evolucionó en conciencia y en su personalidad; por ende ya no le teme a nada.
Quizás muchos podrán o no compartir este punto de vista, pero lo esencial es que, fue y es su Conciencia la que se transformó en todo sentido y eso es evolución pura y espiritual concreta.
Muchos fueron los que se quedaron allá para siempre, en un lugar que nos y les pertenece, pero ese es otro tema; y otros que volvieron y no pudieron “transformase en vida", no obstante lo consiguieron, porque, La Transformación, en sí misma la realizaron en el momento justo y necesario.
En definitiva, salud y honor para todos ellos, porque en la guerra también se puede morir de amor con dignidad, románticamente, por el compañero de al lado, por uno mismo y por nuestra bandera.
Poesías: “La Transmutación Del Ser” (por Uriel) --- "Mi Salvadora" (por Azrael)
por Uriel
La Transmutación Del Ser
¿Es el objetivo a alcanzar?
¿Es la perla más deseada de la vida?
¿o simplemente es algo efímero,
metafórico, y sutil?
¿Es el elixir de la vida eterna?...
Todo puede ser,
menos convertirse en un objeto.
Todo puede transformarse…
Todo puede transmutarse…
Nada deja de ser válido.
Lo negativo, puede transmutarse, en positivo.
La muerte en vida…
El odio en amor…
El gusano en mariposa…
El cuerpo en espíritu…
El espíritu en esencia…
¡Eso es la transmutación del Ser!
Convertirse a sí mismo,
En esencia y conciencia.
¿Es el objetivo a alcanzar?
¿Es la perla más deseada de la vida?
¿o simplemente es algo efímero,
metafórico, y sutil?
¿Es el elixir de la vida eterna?...
Todo puede ser,
menos convertirse en un objeto.
Todo puede transformarse…
Todo puede transmutarse…
Nada deja de ser válido.
Lo negativo, puede transmutarse, en positivo.
La muerte en vida…
El odio en amor…
El gusano en mariposa…
El cuerpo en espíritu…
El espíritu en esencia…
¡Eso es la transmutación del Ser!
Convertirse a sí mismo,
En esencia y conciencia.
por Azrael
Mi Salvadora
Si no supiera que existís
La angustia del ayer me invadiría
Como el mar embravecido se alzaría
Contra mi triste existencia juvenil.
Si las olas del mar fueran tu cuerpo
Y yo pudiera inmergirme en esas aguas
La suavidad de tu espuma blanca y pura
Se igualaría tan sólo a tu hermosura.
Eterna era mi búsqueda en el mundo
Buscando ese tesoro tan preciado
Creyéndome por el amor menospreciado
Sintiéndome tan sólo un vagabundo.
Y apareciste vos para salvarme
Para cerrar esa herida tan sangrante
Si Dios me iluminó y pude encontrarte
Es porque él así quiso premiarme.
La angustia del ayer me invadiría
Como el mar embravecido se alzaría
Contra mi triste existencia juvenil.
Si las olas del mar fueran tu cuerpo
Y yo pudiera inmergirme en esas aguas
La suavidad de tu espuma blanca y pura
Se igualaría tan sólo a tu hermosura.
Eterna era mi búsqueda en el mundo
Buscando ese tesoro tan preciado
Creyéndome por el amor menospreciado
Sintiéndome tan sólo un vagabundo.
Y apareciste vos para salvarme
Para cerrar esa herida tan sangrante
Si Dios me iluminó y pude encontrarte
Es porque él así quiso premiarme.
Sueños: "La Nueva Tierra"
por Viento De La Mañana
Llegamos al nuevo hogar. Después de varios miles años luz arribamos a un lejano planeta muy similar a la Tierra en su atmósfera y en su paisaje. Establecimos una pequeña colonia y nos dedicamos a construir una sociedad, tratando de superar todos aquellos errores de la historia humana. Básicamente era una ciudad organizada a partir de la vocación de cada uno, por lo cual los conflictos de clase habían quedado felizmente atrás. Tampoco existía la familia sino que toda la colonia estaba conformada por hermanos mayores y hermanos menores, todos hijos de un mismo padre cósmico. Hacía poco tiempo que estábamos allí. Vivíamos en una ciudad amurallada como las del antiguo medioevo terrestre, de la cual no podíamos salir sin la expresa autorización de los sabios científicos. Sólo ellos estaban autorizados a estudiar el exterior. Siendo niño no había tenido mayor curiosidad, pero con el correr del tiempo el deseo de conocer qué había más allá de las murallas era casi un pensamiento diario. Un día desaparecieron dos de nuestros más iluminados científicos y todos fuimos presa de la tristeza y la pesadumbre. Hubo expediciones para buscarlos pero no tuvieron ningún resultado, más que el de confirmar su desaparición. Pasaron algunas semanas de todo esto cuando estábamos mi hermana y yo en el faro, viendo las tierras que se extendían mas allá de nuestra ciudad. Era un lugar hermoso y deshabitado. Nos preguntábamos porque no nos dejaban salir siendo un lugar tan bello... entonces algo nuevo comenzó a pasar entre nosotros. Al mirarnos nos sentimos atraídos y comenzamos a tocarnos, y a besarnos. Todo era nuevo, nadie nos había hablado de estas sensaciones. No supimos bien qué hacer, cómo continuar, temíamos ser vistos. Así que sin pensarlo demasiado nos alejamos de la ciudad hacia el campo para poder expresarnos libremente sin ningún tipo de limitaciones. En la escuela nos habían explicado que no había humanidad en este nuevo mundo, y que no nos dejaban salir por los animales salvajes que andaban por allí. Eso no nos importó, nada nos importaba. Caminamos bastante hasta casi perder de vista la ciudad cuando de pronto una manada de animales parecidos a rinocerontes casi nos atropella. Nos tiramos a un costado refugiándonos en una cueva. Y fue allí cuando nuestras vidas dieron un giro de ciento ochenta grados... Un grupo de personas corría tras estos rinocerontes queriendo cazarlos con lanzas y otras armas rudimentarias. Eran como nosotros pero más grandes y con un color de piel más bien verde agua. Su extraño idioma nos impedía interpretar lo que decían. Tuvimos miedo y escapamos de allí procurando no ser vistos. Corrimos hasta llegar a una aldea. Estaba llena de ellos. Nos habían mentido toda la vida, este planeta estaba habitado. En el medio de la aldea había una estatua de nuestro salvador tal cual estaba en el centro de nuestra ciudad. Y a sus pies estaban nuestros dos sabios científicos predicando la palabra divina. Los nativos parecían asentir ante la nueva doctrina, pero su visión de la devoción era muy distinta a la nuestra. En un estallido de alegría, luego de terminar el discurso, tomaron a los científicos, los sujetaron sobre un altar de piedra y el sacerdote mayor de los nativos les abrió el pecho con una gran daga plateada. Luego de esto la euforia creció, y todo se lleno de humo proveniente de las fogatas y de las hierbas aromáticas que los ritualistas quemaban...
Sueños
La Nueva Tierra
Llegamos al nuevo hogar. Después de varios miles años luz arribamos a un lejano planeta muy similar a la Tierra en su atmósfera y en su paisaje. Establecimos una pequeña colonia y nos dedicamos a construir una sociedad, tratando de superar todos aquellos errores de la historia humana. Básicamente era una ciudad organizada a partir de la vocación de cada uno, por lo cual los conflictos de clase habían quedado felizmente atrás. Tampoco existía la familia sino que toda la colonia estaba conformada por hermanos mayores y hermanos menores, todos hijos de un mismo padre cósmico. Hacía poco tiempo que estábamos allí. Vivíamos en una ciudad amurallada como las del antiguo medioevo terrestre, de la cual no podíamos salir sin la expresa autorización de los sabios científicos. Sólo ellos estaban autorizados a estudiar el exterior. Siendo niño no había tenido mayor curiosidad, pero con el correr del tiempo el deseo de conocer qué había más allá de las murallas era casi un pensamiento diario. Un día desaparecieron dos de nuestros más iluminados científicos y todos fuimos presa de la tristeza y la pesadumbre. Hubo expediciones para buscarlos pero no tuvieron ningún resultado, más que el de confirmar su desaparición. Pasaron algunas semanas de todo esto cuando estábamos mi hermana y yo en el faro, viendo las tierras que se extendían mas allá de nuestra ciudad. Era un lugar hermoso y deshabitado. Nos preguntábamos porque no nos dejaban salir siendo un lugar tan bello... entonces algo nuevo comenzó a pasar entre nosotros. Al mirarnos nos sentimos atraídos y comenzamos a tocarnos, y a besarnos. Todo era nuevo, nadie nos había hablado de estas sensaciones. No supimos bien qué hacer, cómo continuar, temíamos ser vistos. Así que sin pensarlo demasiado nos alejamos de la ciudad hacia el campo para poder expresarnos libremente sin ningún tipo de limitaciones. En la escuela nos habían explicado que no había humanidad en este nuevo mundo, y que no nos dejaban salir por los animales salvajes que andaban por allí. Eso no nos importó, nada nos importaba. Caminamos bastante hasta casi perder de vista la ciudad cuando de pronto una manada de animales parecidos a rinocerontes casi nos atropella. Nos tiramos a un costado refugiándonos en una cueva. Y fue allí cuando nuestras vidas dieron un giro de ciento ochenta grados... Un grupo de personas corría tras estos rinocerontes queriendo cazarlos con lanzas y otras armas rudimentarias. Eran como nosotros pero más grandes y con un color de piel más bien verde agua. Su extraño idioma nos impedía interpretar lo que decían. Tuvimos miedo y escapamos de allí procurando no ser vistos. Corrimos hasta llegar a una aldea. Estaba llena de ellos. Nos habían mentido toda la vida, este planeta estaba habitado. En el medio de la aldea había una estatua de nuestro salvador tal cual estaba en el centro de nuestra ciudad. Y a sus pies estaban nuestros dos sabios científicos predicando la palabra divina. Los nativos parecían asentir ante la nueva doctrina, pero su visión de la devoción era muy distinta a la nuestra. En un estallido de alegría, luego de terminar el discurso, tomaron a los científicos, los sujetaron sobre un altar de piedra y el sacerdote mayor de los nativos les abrió el pecho con una gran daga plateada. Luego de esto la euforia creció, y todo se lleno de humo proveniente de las fogatas y de las hierbas aromáticas que los ritualistas quemaban...
Tao Te King (Escritos En El Sentido Necesario) - Capítulo XXXVII
por Zedekiel
El sentido, en su trascendencia, realiza sin hacer.
Si los gobernantes lo comprendieran, el pueblo evolucionaría.
Si surgiera el deseo de interferir, éste debería ser desechado.
Sin ambiciones, hay paz; luego,
que el mundo encuentre su sentido, por sí mismo.
Tao Te King
Escritos En El Sentido Necesario
Lao Tse
El Sentido Y El Mundo
Lao Tse
El Sentido Y El Mundo
El sentido, en su trascendencia, realiza sin hacer.
Si los gobernantes lo comprendieran, el pueblo evolucionaría.
Si surgiera el deseo de interferir, éste debería ser desechado.
Sin ambiciones, hay paz; luego,
que el mundo encuentre su sentido, por sí mismo.
Tai Chi Chuan - "El Tai Chi Chuan Como Drama Iniciático" (17ma parte)
por Damián
Tai Chi Chuan
El Tai Chi Chuan Como Drama Iniciático
(17ma parte)
Recoger El Fruto
Recoger el fruto
Todo tiene su tiempo.
Tiempo de nacer,
tiempo de crecer,
y tiempo de partir.
El fruto maduro es el alimento del taoísta.
Ni antes, ni después.
Hay un instante en el que el corazón se abre.
Saber cuando, es el secreto de este arte.
Todo tiene su tiempo.
Tiempo de nacer,
tiempo de crecer,
y tiempo de partir.
El fruto maduro es el alimento del taoísta.
Ni antes, ni después.
Hay un instante en el que el corazón se abre.
Saber cuando, es el secreto de este arte.
Astrología Espiritual
por Uriel (textos) y Zedekiel (gráficos)
Avances En La Interpretación
En La Astrología Espiritual
Aspectaciones
(2da Parte)
Estimados colegas y lectores, todos conocemos la definición de “Aspectaciones”, en sí mismo no es tan difícil. Darse cuenta de que se refiere a la “relación armónica o desarmónica que, existe entre uno más potenciales ubicados en los distintos arquetipos zodiacales”. Sabemos y/o conocemos su clasificación; armónicos: semi sextiles, sextiles, trígonos y quinconcios; desarmónicos: semi cuadraturas, cuadraturas. También se encuentran las oposiciones. A todo esto cuál es objetivo final. El objetivo final es saber “orientar” al consultante a través de las Aspectaciones; interpretando así lo que es su destino y lo que le depara para su propia evolución. O sea que, de acuerdo a su carta natal es lo que, la conciencia encarnada, a través de la personalidad, vino a este mundo a experimentar y resolver en pos de su evolución, además de ello, sabiendo observar las mismas, es lo que se espera del Ser Conciencia que pueda Evolucionar en esta encarnación.
No basta con saber leer e interpretar cuáles son las energías de los potenciales en conflicto, sino que, debemos profundizar aún más, ¿cómo?, a través de las regulaciones y los circuitos que ellas mismas forman.
Para poder hacer esto debemos crear lo que se denomina “circuitos de senderos” y para ello existen nuevos conocimientos, “Cábala Integrada”; con lo cual jerarquizamos a la Astrología Espiritual, pasando a denominarse Astrología Integrada.
No todo termina allí, a todo esto se le debe sumar los nuevos conocimientos sobre Astrología Estelar y así ya se puede dar y brindar una mejor interpretación al consultante en cuanto al por qué de determinadas radioangulaciones. Pero, en esta serie de notas, a las que nos referimos, sólo nos ocuparemos del tema en cuestión, las Aspectaciones.
Para comenzar debemos hacer un cambio radical conceptual respecto de las Oposiciones. Hasta ahora se las interpretaba como dos energías potenciales que se encontraban en franco enfrentamiento, teniendo el ser conciente que decidirse por alguna de ellas. De acuerdo a los nuevos conceptos, las “oposiciones”, desde este nuevo punto de vista significan que dichas energías deberían ser utilizadas como energías “Complementarias” de acuerdo a donde se encuentran dichos potenciales, o sea, interpretando a los mismos en qué arquetipo zodiacal y sector se encuentran.
Estimados colegas… Sí, lo que ud está pensando es cierto, esto es una revolución en pos de la Evolución del Ser Conciente.
No basta con saber leer e interpretar cuáles son las energías de los potenciales en conflicto, sino que, debemos profundizar aún más, ¿cómo?, a través de las regulaciones y los circuitos que ellas mismas forman.
Para poder hacer esto debemos crear lo que se denomina “circuitos de senderos” y para ello existen nuevos conocimientos, “Cábala Integrada”; con lo cual jerarquizamos a la Astrología Espiritual, pasando a denominarse Astrología Integrada.
No todo termina allí, a todo esto se le debe sumar los nuevos conocimientos sobre Astrología Estelar y así ya se puede dar y brindar una mejor interpretación al consultante en cuanto al por qué de determinadas radioangulaciones. Pero, en esta serie de notas, a las que nos referimos, sólo nos ocuparemos del tema en cuestión, las Aspectaciones.
Para comenzar debemos hacer un cambio radical conceptual respecto de las Oposiciones. Hasta ahora se las interpretaba como dos energías potenciales que se encontraban en franco enfrentamiento, teniendo el ser conciente que decidirse por alguna de ellas. De acuerdo a los nuevos conceptos, las “oposiciones”, desde este nuevo punto de vista significan que dichas energías deberían ser utilizadas como energías “Complementarias” de acuerdo a donde se encuentran dichos potenciales, o sea, interpretando a los mismos en qué arquetipo zodiacal y sector se encuentran.
Estimados colegas… Sí, lo que ud está pensando es cierto, esto es una revolución en pos de la Evolución del Ser Conciente.
La Novela de Pepe: Capítulo 6 → "El Sagrado Amor"
por Arjuadah
La Novela De Pepe
Capítulo 6
"El Sagrado Amor"
“El Sagrado Amor”. Para Él; formaba parte de un todo. Un todo que podía ser dividido en 3 niveles diferentes de “Amor” y cómo brindar ese amor.
Digamos que, su capacidad de “Amar” era enorme, podía amar a un ser vivo, como a los vegetales y plantas, los animales, hasta un ser humano, también su grado de
solidaridad era considerable y su amor impersonal para llevarlo a cabo era admirable.
solidaridad era considerable y su amor impersonal para llevarlo a cabo era admirable.
Pocas veces o mejor dicho casi nunca se involucraba en cuestiones que no le eran concernientes a él. Pero, por sobre todo “amaba con sabiduría”, como nadie.
Cuando tenía que poner las cosas en su lugar lo hacía en donde fuese y ante quien o quienes fuesen, no le importaba en lo más mínimo y de ello ha habido pruebas más que suficientes.
Pero, sin duda, su gran amor, fue Mariam (María Magdalena). ¿Por qué? Porque cabe aclarar, que él era un ser humano de carne y hueso, con sentimientos y afectos, pero sobre todo, era “hombre”.
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